Palmasola, un espejo de Bolivia

Mi pariente espiritual es fuerte como la mayor parte de las cholas cochabambinas y es por ello que muy pocas veces la vi llorar como la otra mañana cuando me leía los periódicos del país que describían la tragedia ocurrida en la cárcel Palmasola, en la ciudad de Santa Cruz, donde murieron treinta personas.
por Paulovich
Conmovido ante tal suceso, yo también me alistaba para llorar aunque no tan caudalosamente como mi comadre quien reponiéndose al instante me dijo imperativamente: “Le prohíbo llorar, compadre, porque prefiero que me acompañe a reflexionar sobre tan triste suceso al que considero un espejo que nos refleja la realidad de Bolivia en estos instantes…”
De acuerdo a la visión general del país que tiene mi comadre, Bolivia es una cárcel inmensa con diez millones de encarcelados preventivamente y unos pocos que fueron sentenciados por jueces competentes.
De ahí dimana el hecho de que los personajes que nos gobiernan conviertan su quehacer en la obra de carceleros quienes se indignan cuando un ciudadano boliviano logra huir de esa cárcel gigante, que hoy recibe el nombre de Estado Plurinacional, Multicolor y Folclórico, como es el caso del Senador Róger Pinto, quien logró un Asilo Político en el vecino país del Brasil, lo cual provocó la ira de nuestros principales gobernantes como el Canciller Choquehuanca que hoy actúa como un Carcelero burlado en esta inmensa cárcel como es Palmasola y todas las cárceles de nuestro país, que no son otra cosa que auténticos reflejos de lo que hoy es Bolivia.
Esta interpretación de mi comadre Macacha consiguió mi adhesión pues recordé inmediatamente a todos nuestros compatriotas que hoy viven en muchos países extranjeros mientras nuestros carceleros burlados quieren extraditarlos para que compartan con nosotros las bellezas de esta cárcel sui generis que aún conserva el nombre de Bolivia.
El meollo de la interpretación de una cholita cochabambina quien dijo que Palmasola es una muestra de lo que es nuestro país, tiene mayor asidero si consideramos que tal cárcel estaba custodiada por policías que se hacían los de la vista gorda cuando los presos más antiguos podían introducir en el Penal armas de fuego, bebidas y drogas, igual que en muchas cárceles del país, mientras los Ministros respectivos recién se dieron por enterados.
La cárcel Palmasola es sólo un espejo de la cárcel grande que es nuestro país luego de ser el escenario donde murieron treinta detenidos preventivamente y sin sentencia.
Por eso mi comadre y yo lloramos y denunciamos nuestro encierro en la Cárcel Grande.

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